lunes, 12 de mayo de 2014

Cambios inoportunos



Después  de tantos días de descanso para la celebración de la Primera Comunión de Rocío, vuelvo al ataque y al frente de este blog para haceros partícipes de mis anécdotas casi diarias.

Toda la celebración fue un éxito, porque en todo momento estaba abierta a cualquier propuesta y porque no había puesto el listón muy alto. Me dediqué a hacer llegar a la gente que era una celebración abierta y que todas las propuestas eran válidas. Yo me encargué de las fotos, las tartas, los detalles, las chucherías y, sobretodo de no desesperarme por nada porque mis únicos objetivos eran tres: primero y principal, que mi hija disfrutase de su día; segundo; no caerme con los tacones; y tercero, que no hubiese ningún conflicto de ningún tipo.

Durante esta semana pasada, han pasado muchas cosas como para asimilarlas todas de golpe, pero la más importante, sin duda alguna, es que la tutora de Rocío se ha dado de baja porque está embarazada y se encuentra muy molesta, y la batalla diaria no la beneficia.

El caso es que ahora los profesores del centro deben ir rotando por el centro, porque no es la única baja que se ha sucedido en el centro, sino que hay dos más.

Hasta que no envíen los profesores sustitutos al cole, será un poco extraña la situación, porque no reemplazan los profesores por asignatura, sino que van rotando por horas, según su disponibilidad horaria. Es la única opción que tenemos de momento.

Intentaremos acabar el curso sin excesiva desincronización, procurando acercarnos a cada uno de los profesores y seguiremos luchando como cada día, para hacer siempre lo que debemos en la medida de nuestras posibilidades.

Entre el cole, la academia y la casa, haremos de nuestra niña una mujercita a pesar de las adversidades que se nos presenten.

Gracias por vuestra paciencia. Hasta siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario